Mazatlán, Sin.– En la historia de Venados de Mazatlán han brillado jugadores que dejaron huella no solo por su calidad, sino también por el arraigo y la entrega que mostraron dentro y fuera del diamante. Entre ellos destaca el lanzador Walter Silva, un ídolo local que se ganó el respeto de la afición con su talento, disciplina y amor por la camiseta roja.
Nacido en Mazatlán, Sinaloa, el 4 de enero de 1977, Silva tuvo su primera temporada el 2002 en la Liga Mexicana de Beisbol con Sultanes de Monterrey, sería en la temporada 2006-2007 cuando llegó a las filas de Venados de Mazatlán, donde militó 14 temporadas.

Su aporte fue fundamental en la conquista del campeonato 2008-2009, una corona que le dio a Venados el pase a la Serie del Caribe 2009 en Mexicali, donde Silva subió a la loma para defender los colores de México. Ese mismo año, la constancia en su trabajo le abrió la puerta al beisbol de Grandes Ligas, con los Padres de San Diego, convirtiéndose en otro ejemplo de que el talento mazatleco puede trascender fronteras.
Los números avalan su legado con 1,060.1 entradas lanzadas con los rojos, tuvo un récord de 68 ganados y 69 perdidos, 659 ponches recetados y una efectividad de 3.66 en su carrera con Mazatlán.

Silva no solo fue campeón, también construyó una trayectoria de respeto, siendo uno de los lanzadores con más temporadas vestido de rojo, acumulando marcas que lo colocan entre los grandes referentes de la Nación Roja.
Su último juego fue el 6 de julio del 2009.